Una vez albergados en los albergues, tema que explicaremos en un posterior post, nos reunimos para formalizar la primera copa en tierras teutonas. Realmente no fué la primera, para muchos, pero si la primera para el grupo.
Paseando por la ribera del rio Spree, nos acercamos a un local de la calle Schiffbauer-Damm, el Van Gogh, una coctelería y cervecería muy puesta.
Uri el puto amo, en cuanto a actividades festivas con alcohol por medio.
El local decorado con reproducciones de Van Gogh y algún que otro cuadro cutre, Nacho no quiso deleitarnos con sus conocimientos musicales en un piano del local.
Suerte que Fede era abstemio, aquí le vemos con un Martini en mano.
martes, 29 de mayo de 2007
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